Un Pueblo para su Gente y una Gente para su Pueblo. La Villa de La Orotava es más que un sentimiento. Blog siempre en aguerrida libertad.

lunes, 30 de enero de 2023

La llave del espejo.

Portada de La llave del espejo. Obra de Pilar Torres y finalista Premio Nadal 2021.

 


Género: Novela.

Autora: Pilar Torres (España).

Año de publicación: 2022.

«Jerome observó con cierta nostalgia la imagen que se quedaba atrás; desde aquel punto alejado de las orillas del río Mersey, la ciudad de Liverpool se convertía en un amasijo de mástiles, grúas y edificios recubiertos por masas de nubes que más bien parecían árboles de vapor de color azul acerado. El Arawa, propiedad de la Shaw, Savill and Albion Co., ponía distancia con su avance imparable, y lo hacía a tanta velocidad, que más parecía un esquife liviano que un trasatlántico de cinco mil toneladas.

—¡Papá, vamos, date prisa, no quiero perdérmelo! —Julianne tiró de la chaqueta de su padre…»

 

He de confesar una enorme alegría por hoy reseñar este magnífico libro titulado “La llave en el espejo”. Fue un regalo Reyes y quién me lo hizo acertó plenamente. Y digo plenamente por lo siguiente.

Un libro donde el grueso de su historia se desarrolla en La Orotava entre los años 1895- 1915.

Que encima se lo regalan a una persona como yo, que habita en el Casco de la Villa y es lector. Con el añadido de que el blog hermano de 100 x 100 villeros de La Orotava es La Biblioteca Hiperboreal, donde reseño libros.

No cabía la menor duda de que como villero y lector, y me reitero en ello, iba a someter a este libro a un riguroso escrutinio. Porque ya no sólo se mezclaba una ficción, sino encima desarrollada en La Orotava vieja. Incluso quien me lo regaló me lo advirtió: no seas muy duro con el libro y autora.

Lo tuve un par de días en mi estantería pues estaba sumergido en la lectura de una selección de relatos del mexicano Juan Rulfo y varios compromisos bibliófilos que tenía en el otro blog. Y ya de por sí solo hacía mirar de reojo el lomo de La llave del espejo.

Sinceramente la historia que me fascinado de principio a fin. Tanto que cuando lo concluí el día 26 de Enero al filo de las tres de la madrugada lo primero que hice, y he de confesar que con los ojos humedecidos por lo conmovedor de su final, fue escribirle un mensaje a Pilar Torres con el siguiente texto:

«Hola Pilar. Perdón por lo intempestivo de esta hora y mensaje. Acabo de terminar de leer La llave del espejo y he quedado profundamente emocionado y con los ojos humedecidos. Gracias por traer a Julianne North a La Orotava junto a los demás personajes de este fantástico libro. En el silencio de la noche, y tan cerca que estoy de la calle La Carrera, parece que su pétreo suelo y sus vetustas casas sólo exclaman la admiración por esta bonita historia. Nuevamente felicidades por ello, pues como villero está historia me ha atrapado de principio a fin. Enhorabuena Pilar.»

Era totalmente imposible que yo no leyera con avidez este libro y lo reseñara. En ambos blogs está publicada esta reseña y en los respectivos Instagrams una reseña más condensada, pues ahí hemos de acotarnos a unas paupérrimas 2.200 palabras.

Sin querer hacer spoiler del libro quiero hacer una pequeña dicotomía del libro desentrañando mínimamente a sus principales personajes.

Años 1895 a 1960.

Julianne North: Principal protagonista de esta historia. Una mujer que se tiene que forjar así misma en los innumerables golpes que le da la vida. Pero siempre fuerte y hacia adelante pese a la adversidad. Descubrimos en ella a una mujer encantadora que su único pecado, y si es que tuvo alguno, fue querer ser feliz en la vida y en su afición por la pintura y costura. Personaje muy sufrido y vilipendiado.

Jerome North: Padre de Julianne. Rico empresario de Liverpool que recala en la isla junto a su hija para tratar su tuberculosis. Sólo vive por y para su amada Julianne. Todo un ejemplo de buen caballero inglés y empresario.

Dorothea Williams: Amiga de la infancia de Julianne. De orígenes humildes la familia North prácticamente la adopta convirtiéndose en una hermana para Julianne. En el libro ella representa los incipientes movimientos feministas y sufragistas que ya se fraguaban en Gran Bretaña. Su papel, amistad y sacrificios, en esta historia es fundamental.

Bryce Wright: Sinceramente todo un truhan hijo de la grandísima puta. Hacia muchísimo tiempo que no odiaba con tanta vehemencia a un personaje literario. Dios y el Diablo nos libren en La Orotava de un sujeto así en la realidad o ficción. Mis sentimientos hacía él denotan la gran calidad literaria de la autora en crear a un personaje tan mezquino.

Doña Isabel, marquesa de Treviño: Toda una dama de La Orotava. Conoce a la perfección la realidad social del pueblo con sus virtudes y miserias. Mujer de temple que en todo momento pone sosiego donde hay alboroto. Se convierte en una segunda madre para Julianne. Recia en el carácter, pero de un inmenso cariño para esta joven inglesa.

Dámaso Montañez: Agricultor y guía turístico natural del barrio de la Ranilla en el Puerto de La Orotava (hoy Puerto de la Cruz). Un tipo buena persona, inteligente, servicial, pero muy sufrido. En algunos momentos todos somos Dámaso en esta novela. Las circunstancias de la vida le dan de palos por todos lados

Clara: Joven villera que entra de sirvienta en la casa de los North. Un personaje de una fidelidad absoluta a sus señores. Hasta las ultimas consecuencias. Este personaje tan querido para el lector me recuerda a otra villera que sí existió en la realidad como fue María Luisa, asistente de doña Chana Brier. Las comparaciones son odiosas, pero las similitudes son absolutas porque María Luisa era prácticamente como de mi familia y para ella su señora lo era todo.

Madame Chloé: Profesora de pintura de Julianne y Dorothea. Con este personaje he tenido una relación amor/odio. En una parte de la novela me encantó como mujer muy adelantada a su tiempo. En la otra…

Baldomera Santos Rodríguez: Maestra caladora de la Villa de La Orotava. Personaje que une sus proyectos a los de los North y que la encumbran como fie depositaria y trasmisora del calado canario. La reseño pues su personaje me despierta simpatías ya que desciendo de una saga de caladoras que siempre afirmaron que el calado canario no era el actual sino el practicado en aquella época.  Creo que el personaje de Baldomera dignifica y recuerda a tantas villeras que por trabajo y/o pasatiempo calaban excelentes bordados que tanta fama y renombre tuvieron y seamos sinceros, aún tienen sean los de aquella época o los actuales.

Personajes año 2018.

Gabriel Koon: Tasador de arte de la casa Christie’s. Pasados muchos años le devuelve a Julianne lo que por derecho le pertenece. Personaje empecinado en descubrir la verdad pese a pagar caras las consecuencias. Inicia un periplo por Nueva York, Berlín, Berna; La Orotava y La Laguna por una cuestión de honor personal para lavar el honor de Julianne.

Barbara Scheidemann: Nieta de Julianne North. Una mujer que quiere recuperar lo que le pertenece, más por lazos afectivos que económicos, y que intenta recomponer el pasado de su abuela. Mujer de carácter y seriedad en esa guerra contra las circunstancias que parece que azota a las mujeres de su familia.

Celestine: Directora de la revista NY Modern Art. Un personaje de muchísimas simpatías, porque se huele la tostada antes que nadie. Ella representa a la mujer empoderada del siglo XXI. Las que toman decisiones desde los despachos. Fiel amiga de Gabriel no puede desentenderse de esta historia sin más. Paga también un alto precio por ello.

Tom Cohen: Profesor de Bellas Artes en la Universidad de Nueva York. Un tipo peculiar, pero toda una eminencia en su campo. Es el tercer baluarte del equipo formado por Gabriel y Celestine. Su labor en una especie de agente de campo y cierta decisión arriesgada que toma lleva la novela a un punto álgido que pone al lector en vilo.

Don Melchor Zárate: Nieto de doña Isabel. No necesita presentación. Todo un caballero de la Villa de La Orotava al cual todo patriota orotavense aspiramos a querer parecernos. Su papel en la novela es el nexo que une a Gabriel con la clave del rompecabezas histórico que quiere descifrar. Me ha encantado reencontrarme con don Melchor en este cameo literario, pues no sólo vive en la inmortalidad del buen recuerdo que dejó, sino igualmente en la inmortalidad literaria de este libro. Traerlo de vuelta en estas páginas ha sido reencontrarse con esencia pura de este pueblo.

 
 

Pilar Torres junto a don Melchor Zárate en el jardín de su casa el día que se conocieron. Esta imagen me la ha facilitado Pilar y le he pedido su permiso para incluirla en el escrito. Incido en que para mi ha sido una enorme alegría que don Melchor haya trascendido a la ficción de La llave del espejo.

 

Luego hay una serie de personajes menores que acaban de cohesionar la novela y donde algunos son realmente interesantes por su lealtad y amistad con los personajes principales.

Como verán la novela discurre en tres siglos distritos. Técnica este de saltos en el tiempo con personajes concatenados que a mi me resulta siempre muy atractiva su lectura. Sobre la historia, finalista del premio Nadal  2021, por supuesto no voy a desvelar nada, me ha llamado profundamente la atención su buena redacción y lo bien estructurada que está. Pilar Torres no sólo crea un universo ficticio ambientado en La Orotava, sino que igualmente denota el gran conocimiento que tuvo para escribir esta novela. Pues no es sólo el nudo, trama y desenlace de la misma, sino todo lo que inserta en aquella realidad de Tenerife de finales del siglo XIX y primeros del XX. Y a medida que la fui leyendo me di cuenta de varios detalles, que si bien no se entra en profundidad, sí que aparecen de manera velada en la historia. O al menos así lo he entendido. Expongo algunas observaciones que me parecen muy interesantes.

Jerome y Julianne viajan a Tenerife porque este se encuentra afectado de tuberculosis. Fue un hecho, y así lo demuestran los testimonios de esa época, que mucha gente, sobre todo de muy alto poder adquisitivo, de distintos países de Europa venían a Tenerife a curarse de este cuadro clínico. El caso más notorio en La Orotava fue el de George Graham Tholer, al cual en su momento le dediqué un artículo, y que acabó afincándose en la Villa formando aquí familia con una villera. Incluso lo eché en falta en la novela… ¿O tal vez sí estaba haciendo fotos?

En la travesía de Liverpool a Tenerife Julianna traba amistad con Roxanne Taylor y Beatrice Wilson que van a la isla siguiendo un periplo por diversos países escribiendo un libro de viajes. Desde el primer momento las asocié con las hermanas Florence y Ella du Cane que publicaron en Londres Las Islas Canarias (1911).

Dámaso hace referencia a que sabe hablar inglés porque lo aprendió como guía en las expediciones de todo tipo que se hacían en la isla. Una vez más la autora hila fino en la historia pues referencia las visitas de carácter científico que durante todo el siglo XIX se desarrollan en la isla, siendo una de las más renombradas, por el enorme despliegue logístico que tuvo, la de Piazzi Smith, que fue el que levantó las primeras paredes de lo que hoy es el refugio de Altavista.

A nivel agrícola tratan sobre la caída en el mercado de la Cochinilla que fue un fuerte varapalo para la economía de las islas. Así mismo habla de la técnica del cordón trenzado de la viña y de enfermedades como la popularmente conocida como “ceniza”. También se pone en liza las importaciones/exportaciones desde Canarias a Gran Bretaña. Un comercio que siempre nos ha resultado muy beneficioso y que a lo largo de la historia bien fuera vino, cochinilla o plátanos salvó a este archipiélago de la quiebra absoluta. Hoy se llama turismo y es deseable por todos que siga así.

Este libro es una novela de clara naturaleza femenina y feminista. Pero no de ese feminismo de derribo sistemático, sino ese feminismo positivo de igualdad real y complementario al hombre. De mujeres que dicen o tiro para adelante y peleo como una amazona o me hundo en el fango. Ahí es donde igualmente enlaza con los movimientos feministas y sufragistas incipientes de aquella época. Hay momentos en que Julianne no vive, sino sobrevive. Tanto por las vicisitudes propias como por la coyuntura mundial. Y por otro lado también en una voz que emerge atronadora desde el más profundo silencio reivindicando el talento femenino en la pintura, que también podría extrapolarse a otras disciplinas artísticas.

Se nos muestra igualmente la sexualidad y el acto sexual sin tapujo alguno en una época en que todo era pecado y por tanto tabú. La novela nos muestra desde los más bajos instintos de cama hasta los más finos amantes en las artes amatorias. Nos encontramos ahí unos relatos que salen del estereotipo cosificado de aquella época.

A mi me ha encantado su lectura, siempre quería saber más y más en sus capítulos, porque es una novela que invita a sumergirte en ella. Y más si se es una persona como yo residente en el Casco de La Orotava.

Tanto cuando reseño aquí libros sobre La Orotava y al igual que hago con narrativa en La Biblioteca Hiperbórea nunca suelo recomendar libros porque la experiencia de lector de muchos años he a enseñado que cada lector/a es un mundo. Yo voy reseñando aquello que a mí me ha gustado leer. Pero con este libro sí me la juego. Sí les digo que lo lean. Si eres de La Orotava recorrerás con Julianne North los vestigios de otro tiempo disfrutando de una historia que es una maravilla. Si eres de fuera de la Villa tanto de lo mismo: sus páginas te van a llevar por una ficción que atrapa. Donde te sentirás identificado, y encariñado, con muchos de sus personajes a la vez que a otros odiaras. Pero indiferente no te va a dejar su lectura.

No sé si está reseña está bien o mal redactada. Para esto soy malísimo, pero no quiero despedirme sin las siguientes palabras.

Me ha encantado, y felicito a la autora por ello, este libro se quita de encima esa pesada sombra de que todo debe ser o Alfombras de Corpus o poesías al Teide. Ya eso es cansino. Omite en toda la novela, las Alfombras porque pone en relieve otras cosas. Sinceramente yo como lector ya estoy fatigado de tanto artículo de las Alfombras y tanta poesía a La Orotava. Que están muy bien no cabe duda. Pero adolecemos profundamente más narrativa sobre nuestro pueblo. Que por su puesto la hay, y muy buena. Pero Pilar Torres vuelve a romper una lanza de que La Orotava tiene una historia, un patrimonio y unos escenarios donde la narrativa puede fructificar. Ella ha abierto otra brecha en ese filón literario. Esta novela está para llevarla al cine o la televisión. Y encima rodándola en las mismas localizaciones donde está ambientada.  Ya eso se ha hecho en La Orotava con otras historias en épocas similares. Espero que el tiempo y la justicia literaria lleven ello a cabo. Y repito, La Orotava tiene una poderosa cosmogénesis para desarrollar una profunda narrativa.

Como villero y lector mi profundo agradecimiento a Pilar Torres por traernos a Julianne North a La Orotava. En poner en relieve parte de nuestra historia y en obsequiarnos y honrarnos con esta ficción que emociona. Porque empieza rodeada de agua en un barco que zarpa hacia Tenerife y acaba con los ojos del lector humedecidos de la emoción. 

Y el sagaz lector/a se preguntará ¿Y qué es la llave del espejo? ¿Qué historia está detrás de Julianne North en La Orotava? ¿Qué sucedió para tal sufrimiento de un encanto de mujer? ¿Qué hace en la novela un caballero como don Melchor Zárate? ... Eso mi querido amig@ tendrás que leerlo en el libro para averiguarlo… No pienso desvelar nada. Sumérgete en este mundo del arte pictórico, la costura, la lucha de una mujer… Todo ello mezclado en un libro que te atrapa como si te miraras frente a un espejo.

Me dirán que si tal vez me dejo llevar por la pasión patriótica de que este libro está ambientado en La Orotava. Créanme que no. Soy totalmente neutral., No lo hubiera reseñado si no me hubiera gustado. Soy totalmente neutral y ecuánime y el libro lleva por mi parte las palabras que humilde, y convencidamente, le tributo.

Como expresé más arriba la sometí al más doloso de los escrutinios. Y créanme que cuando se es villero, lector y se reseñan libros pasar esos filtros tremendamente cribados no es baladí. No sólo cumplió las expectativas sino las sobrepasó holgadamente. Creo que hay que darle la oportunidad a Pilar Torres y a La llave del espejo.

Saludos.

 

*Presentación de La llave del espejo en el Ayuntamiento de La Orotava.