Imagen de don José Vega Herrera (1937-2024) vista en las redes sociales. Posiblemente perteneciente a la parroquia de Santo Domingo de Guzmán. |
Esta mañana en Pamplona se daba eterna sepultura al padre Paúl don José Vega Herrera. Ha sido este un fallecimiento que me ha dejado una fuerte sensación de nostalgia, pues aunque yo no frecuente la Iglesia, aunque la parroquia de Santo Domingo de Guzmán es una bonita excepción de vez en cuando, con don José siempre tuve un trato muy afable.
El año pasado cuando él ponía rumbo hacia tierras pamplonesas yo escribía que en mi humilde opinión era un hombre santo. Por la forma en la que vivía y el mensaje que trasmitía, valores acordes que luego él mismo cumplía, hacían de don José un sacerdote extraordinario.
No recuerdo exactamente en qué festividad o procesión fue, pero estando un día en misa dijo una de las frases más certeras que yo haya escuchado de un sacerdote: “… la procesión no sale a la calle, pero debemos sacarla de este templo de forma individual rumbo al hogar de nuestros corazones y meditar sobre ella…”
Una frase que se me quedó muy presente.
Tal vez haya fallecido el último gran sacerdote que yo he conocido en La Orotava. No digo que los actuales no sean grandes sacerdotes, pero como no trato con el clero no puedo opinar sobre ellos desde una perspectiva personal.
A mi me hubiera gustado que don José hubiera estado más tiempo por estos lares y gozando de buena salud. Incluso la despedida póstuma que hoy se le ha dado en Pamplona hubiera sido en La Orotava. Que hubiera descansado eternamente en esta tierra villera. Porque cuando un sacerdote de forma tan notoria y explicita es apreciado y querido por sus feligreses, y siempre y cuando se le pueda dar una buena calidad de vida en sus achaques de salud, debería quedarse. Secularizado, pero siendo el mejor consejero del relevo generacional.
Quiero trascribir aquí las emotivas
palabras de despedida que el año pasado doña Herminia González le dedicó y que
fueron publicadas luego por serpaul.org: https://serpaul.org/p-jose-vega-herrera-cm-un-hombre-bueno-y-sabio/
«Reverendo Padre Don José Vega Herrera, Paúl Superior de la Comunidad de Padres Paúles de la Villa de la Orotava.
Estimado Padre,
nuestra comunidad quiere expresarle el cariño, respeto y agradecimiento por su
dedicación a lo largo de los 20 años de servicio como sacerdote en esta
Parroquia.
Nació hace 86 años en Gran Canaria, en Tejeda, y se dice que la gente de Tejeda
es cálida, hospitalaria, amable y acogedora, con un gran sentido de la
comunidad y solidaridad. Ya mostró desde pequeño que tender la mano y ocuparse
de los demás, de su numerosa familia, era su pasión. Nosotros hemos tenido la
suerte de que todas estas raíces las echara en La Orotava y las hiciera crecer
aquí, en el que es su pueblo también.
Ha realizado su
trabajo pastoral en esta Parroquia de Santo Domingo de Guzmán, San Diego de
Alcalá, así como con los diferentes grupos y realidades de la familia
Vicenciana de nuestra Villa, desde octubre de 2003. También trabajó con las
Hermanas de la Caridad, dirigiendo, formando y guiando los retiros. Entre
muchos otros cometidos fuera de nuestro municipio, destaca su experiencia como
director del Seminario de los Padres Paúles de la Provincia de Zaragoza y sus
misiones en Latinoamérica como formador de seminaristas Paúles. Ha sido
Consiliario de la Comunidad de las Hijas de la Caridad y de la Asociación de la
Medalla Milagrosa y reorganizó la hermandad de la Virgen del Santo Rosario.
No le quepa duda que deja una huella profunda en todos los que hemos tenido el
privilegio de escuchar sus palabras, sus homilías, sus charlas, recibir su
consejo y compartir momentos de espiritualidad, conocimiento y aprendizaje.
Usted Padre José,
ha sido un buen sacerdote y un hombre bueno, sencillo y humilde, pero si hay
que destacar algo más, es su sabiduría y su inmensa luz que nos ha guiado e
iluminado en los momentos más difíciles que hemos vivido cada uno de nosotros.
Una luz también que ha brillado en la alegría, con los niños, los ancianos,
siempre pendiente de sus feligreses y de sus vecinos.
¡Y tanto que lo ha hecho! Podemos contar muchísimas anécdotas donde se muestra
su empatía y atención hacia los demás.
¿Recuerda el día que subió corriendo asfixiado al campanario para decirle a los monaguillos: “chicos, chicos no toquen más, los vecinos se están quejando”
O, cuando le hemos preguntado: “Padre José, ¿cómo está?”
Y siempre respondía: “De primera”. Estuviese como estuviese.
Recientemente ha sido destinado a Pamplona para continuar allí su labor Pastoral. En palabras del Papa Francisco «Esta es la actitud del verdadero apóstol; seguir adelante con confianza, prefiriendo la inquietud de las situaciones inesperadas, a la costumbre y a la repetición. Esta valentía nace de la confianza en la grandeza de Dios, que ama obrar en nuestra debilidad»
Palabras que definen a la perfección su actitud, su personalidad carismática, Padre José.
A partir de este momento abrimos nuestro corazón a quienes se quedan en esta Comunidad de Padres Paúles, trabajando unidos por esta parroquia.
Gracias, gracias y mil gracias, por enseñarnos a creer, confiar, amar, respetar y servir más y mejor a Dios.
Gracias por transmitirnos esa devoción, sin igual por nuestra Madre de la Medalla Milagrosa, San Vicente de Paúl y Santa Luisa de Marillac, santos de marcado carácter asistencial y que está tan arraigado en las comunidades de los Padres Paúles e Hijas de la Caridad.
Se lleva con usted un trozo de nuestro corazón. Recuérdenos con alegría, como esa que usted contagia con su sonrisa.
Esperamos que el conocimiento que ha compartido con tanta generosidad, continúe inspirando a otros.
Pedimos al Señor y a la Santísima Virgen le bendigan y le protejan en su nueva andadura.»
En las breves horas que hoy he pasado en La Orotava y preguntando a varias personas muy asiduas a la parroquia de los paules la opinión de lo buen sacerdote y mejor persona que era don José es unánime.
En fin, una pena enorme. Lo llevaremos siempre presente en nuestros recuerdos.
Igualmente quiero recordar que el viernes 6 de Septiembre a las 19:00 horas en la parroquia de Santo Domingo de Guzmán se celebrará una Eucaristía por su eterno descanso.
Esquela publicada en el Diario de Navarra. |