Un Pueblo para su Gente y una Gente para su Pueblo. La Villa de La Orotava es más que un sentimiento. Blog siempre en aguerrida libertad.

sábado, 1 de agosto de 2020

Julio Villavicencio.


Me acabo de enterar de que ayer falleció Julio Villavicencio a la edad de 93 años y quería dedicarle estas humildes y sentidas palabras. No lo hice en la pasada jornada pues como digo me estoy enterando ahora mismo de su defunción.
Hablar de Julio es hablar de historia en La Orotava y sobre todo de historias de la zona del Calvario y el Llano donde este gran personaje desarrolló su carrera profesional y parte de su vida social. Siempre lo recuerdo afanoso en sus trabajos mecánicos junto a Santiago, otro personaje fallecido hace algunos años pero de historias y anécdotas impresionantes, muchas de ellas vividas junto a Julio en esa casa con tanta historia como es la popularmente conocida “donde estaba el bar de Reinaldo”. Personaje y bar del que ya en su momento dediqué un artículo El bar de Reinaldo

Julio fue otro de esos villeros que en su debido momento se debió de haber hecho extensas entrevistas contando sus vivencias villeras que fueron muchas. Personas que hicieron patria y que la raigambre de sus raíces estaba plenamente asentadas y fortalecidas en nuestra noble tierra. Hombre afable, correcto que aunque yo no tenía con él una amistad propiamente dicha siempre me pareció un caballero.

No tengo en mis archivos ninguna foto para acompañar este escrito, pero no he querido omitir estas palabras de otro personaje de esa gran generación de villeros de la que él formó parte. Otro trocito de la historia de La Orotava que ha trascendido a las moradas cósmicas.

Mi más sentido pésame para su familia y amigos.

Descanse en Paz Julio Villavicencio.