Este año 2024 está dejando en su recorrido, y todo lo que aún queda, una triste vorágine de fallecimientos.
Esta mañana en el duelo de Nico me enteré que falleció Josefina, a la hora de publicar esta entrada ya le habrán dado sepultura, profesora de gimnasia durante muchos años del colegio de la Milagrosa y una de las promotoras en La Orotava del Coro y Danzas de la Sección Femenina.
Descanse en Paz doña Josefina.
Pero luego en el entierro de Nico me enteré de que hace días falleció Charo Zárate. Noticia luctuosa que no me la creía, pero ya la tengo confirmada por varias personas. Sinceramente fue una pena, pues me hubiera gustado acompañarla.
Charo era una persona de lo más encantadora. Siempre la viva simpatía y amabilidad con un genuino don de gentes. Tristemente no tengo ninguna foto con ella o de ella, que yo sepa, pero cuento las siguientes anécdotas.
El 26 de mayo de 2013, en la primera edición de Entre Molinos, Charo sintió una profunda emoción viendo todo aquello. Ella vibraba espiritualmente en su amor a la Patria. Y nos encontramos en la antigua barbería frente al Ayuntamiento y allí deparamos una emocionada charla. El ver aquella recreación, el evocar recuerdos y anécdotas la conmovió inmensamente hasta el punto de que soltó alguna lagrimita.
Mujer muy religiosa. Gustaba de sus misas en las parroquias de la Inmaculada Concepción y Santo Domingo de Guzmán. Tenía por costumbre, con aquel desparpajo que la caracterizada de ir antes de misa a la sacristía para que le leyeran las lecturas del día. Ella escuchaba con suma atención en un acto de poder interiorizar mejor la pertinente misa.
Charo, siento mucho no haberla acompañado en su última travesía por su querida Villa de La Orotava. Se nos va incluso una figura arquetípica. Con su andar y peinado característico y eterno cigarro. Pero sobre todo con ese gran humanismo que poseía.
En las ultimas jornadas, y en lo que va de año, La Orotava está siendo muy golpeada con tanta gente buena que se ha ido. Y no quiero caer, y menos en estos días, en reflexiones que me pueden llevar a una depresiva nostalgia. Aunque parezca que nada cambia se nos están yendo las mejores esencias villeras.
Mi más sentido pésame para familiares y amigos.
Descanse en Paz Charo Zárate.