María Hernández Sacramento (1934-2024). |
Triste noticia la que hoy sucumbe mis ánimos como es el fallecimiento de la amiga María Hernández Sacramento y que nos deja a todos sumidos en una profunda tristeza. Desde hacía unas semanas sabíamos que estaba delicada de salud y hoy tristemente ha tenido su desenlace.
De María puedo decir que me conocía desde antes de yo nacer. Hija de Justo y Lucia formaron una de las familias más conocidas y apreciadas del Casco, concretamente en la calle Calvario. Desde ese hogar natal y su casa en el barrio del Ramal transcurrió su vida y la de los suyos.
Siempre tengo muy presente el recuerdo de su madre asomada a la privilegiada atalaya de la ventana de su domicilio, donde vio transcurrir la vida de La Orotava en tiempos mejores que los actuales. De doña Lucia tengo un artículo publicado el pasado año. María en estos últimos años ocupó tan insigne lugar y cada vez que la veía asomada siempre deparaba un rato de charla con ella. Yo era fan absoluto de sus conversaciones por lo mucho que aprendía con ella del pueblo.
Y de igual manera tengo muy presente ver a María y a su hermana Sita acompañando a su madre a las novenas de María Auxiliadora donde rezaba el Santo Rosario antes de la misa. Esa imagen se me quedó a mi muy grabada en la niñez y juventud, pues yo acompañaba a mi abuela a dichas novenas.
Siempre la recordaré con aquel carácter jovial y alegre. Su animada conversación y chascarrillos, y su sapiencia sobre La Orotava que tan intensamente la vivió. Porque María sentía y hacía pueblo.
Casada con Isidro, otro villero muy querido por todos, tuvieron dos hijos: Isidro y María del Carmen, los dos nombres más bonitos que un matrimonio de villeros le puede poner a su prole.
Igualmente a la tristeza de esta pérdida siento un tremendo pesar por sus hijos, que la querían con locura, y por su hermana Sita. Ellas dos fueron el ejemplo de perfectas hermanas siendo uña y carne. No quiero ni imaginar lo que deben estar pasando.
Si duro debe ser esto para Isidro y María no menos lo es para Sita. Ni imaginar puedo el inmenso dolor que la debe de estar envolviendo. Dos hermanas que se querían la una a la otra a más no poder. |
María gracias por brindarme esta amistad que ha durado en cada minuto de mi vida desde antes de yo nacer. Gracias por ser como eras y por tu enorme orgullo de sentirte villera. Con tu marcha pierdo un vínculo más con la Orotava antigua, la verdadera Orotava. Ya no va quedando nadie y en mi aumenta la sensación de vacío y de personas irrepetibles que por ley de vida hemos de decirles el doloroso adiós. No es fácil despedirte, eso lo sabemos muchísimas personas que te conocimos y apreciamos. Porque tu forma de ser y personalidad calaron hondo. Indudablemente un trocito más de La Orotava fallece contigo.
Me queda el consuelo de que ya trasciendes a las moradas cósmicas donde te reunirás de nuevo con tus queridos padres y te reencontraras con tu amado Isidro, pues eran tal para cual de puro amor y encanto. Y allí seguro que te esperan muchísimos villeros de esa Orotava que tú siempre llevaste a gala y orgullosa de ello.
Mi más sentido y dolorido pésame para Isidro y María, para Sita y demás familiares y amigos. Porque hoy estamos de luto y con el corazón roto. Desde lo más recóndito del corazón y los sentimientos uno percibe en su interior que algo se rompe, se fracciona y se pierde en la adversidad de la implacable Parca que se va llevando inexorablemente a todas nuestras personas queridas dejando una sensación de vacío y añoranza que es imposible de erradicar.
Buen viaje María y hasta que nos volvamos a reencontrar.
María Hernández Sacramento. Descanse en Paz.
Epílogo.
Sinceramente estas últimas jornadas están siendo muy tristes. Ayer jueves María y hoy viernes Nico, su funeral será mañana sábado a las 10:30 H en la parroquia de Santo Domingo de Guzmán. Dos grandes de La Orotava, y prácticamente vecinos, que se han ido casi a la vez para mayor pena y desazón de esta muy Noble y Leal Villa de La Orotava.
Pero quiero centrarme en la figura de María. Ayer cuando me comunicaron su fallecimiento a última hora de la tarde este escrito salió como buenamente pude redactarlo entre tristeza y lágrimas. Quisiera concretarlo un poco más.
Allá por Noviembre del año 2022 me crucé con María. Estaba en la ventana de su domicilio en la calle Calvario y paré a saludarla. Aquel breve saludo se convirtió en casi tres horas de charla. Pero no fue cualquier charla, que permítanme la dispensa que quede en el ámbito de la privacidad entre María y yo lo subyacente de la misma. Ella había estado muy enferma y hospitalizada, pero salió adelante.
Igualmente estaba al tanto de mis actividades en este blog y al poco de la conversación me di cuenta de una cosa: aquello no era una simple charla. María me estaba dando una charla a título póstumo.
Me habló de su vida y de prácticamente casi de noventa años (los cumplió este mes estando ingresada) de recuerdos villeros. Fiestas, tradiciones, vecinos… Y en un momento dado, aprovechando que Sita fue a responder a una llamada telefónica, se me quedó mirando muy seria, con aquellos ojos de mirada tan clara y profunda que tenía, y me dijo “ya estoy preparada”. Yo sabía a lo qué se refería, pero siempre negamos las tristes evidencias ante las personas que apreciados. Así que le pregunté preparada para qué. Y me respondió “preparada para irme ya al otro lado con Isidro y mis padres…”. Yo me enfadé y le reñí, porque ella era una mujer fuerte, como así lo demostró durante más tiempo, pues ella fue de genética familiar de mujeres longevas. Como me dijo esta tarde Isidro tras el entierro, peleó hasta el final.
Aquella larga conversación que tuvimos esa tarde María y yo la guardo como una de las mejores enseñanzas que yo he podido recibir sobre La Orotava y sus gentes. Yo no creo en las casualidades, sino en las causalidades, y siempre he pensado que María pacientemente tarde tras tarde esperó asomada a su ventana a que yo pasara para relatarme el contenido de aquella larga platica.
Anoche se lo recordaba a Sita en el duelo y esta tarde a la salida del entierro nos fundimos en un abrazo donde ambos lloramos desconsoladamente la pérdida de su querida hermana. Y tras agradecerme este escrito, le volví a recordar esa conversación que para mi fue de una profundidad y luminosidad que cada palabra dicha se me ha quedado grabada en la mente. Como igualmente se lo comuniqué esta tarde a Mary Carmen.
Por otro lado Sita también me comentaba que María cumplió 90 años estando ingresada en el hospital y que Isidro y Mary Carmen le llevaron una tarta para celebrarlo.
María en todo momento en el hospital estuvo consciente y con la mente lucida. Tras cantarle el cumpleaños feliz sus hijos y el personal sanitario pidió que compartieran la tarta con todos.
Y he aquí otra de las grandezas de María. El personal sanitario se quedó gratamente sorprendido de su actitud en todo momento pese a estar próximo el desenlace. Ejerció de buena villera hasta el final con una educación exquisita con todo el personal y su tan característico sentido del humor. Fue ella en pura esencia pese a las adversidades.
Naciste en Abril y te marchaste en Abril. En este mes primaveral donde la Naturaleza eclosiona y brilla en su esplendor. Porque así eras tú María, lozana y alegre en una eterna y bella primavera.
A María va a ser totalmente imposible olvidarla. Tanto en el ámbito vecinal como personal. Ahora nos toca llorarla y recordarla siempre con el inmenso cariño que ella merece.
La misa funeral por el entierro de María será mañana viernes a las 13:30 H en la parroquia de la Inmaculada Concepción.
La misa por el eterno descanso de María será el lunes 29 de Abril a las 19:30 H en la parroquia de la Inmaculada Concepción.