Son nuestra primera línea ofensiva
y de contención en calles, plazas, edificios públicos o privados, residencias,
oficinas y en hogares particulares entre cientos de cosas más. Los
profesionales de este sector, me es igual público que privado, son otro de los
grupos esenciales que no pueden parar en esta catarsis que estamos viviendo. A
la vez considero que es uno de los mayores grupos de riesgo por lo sensible de
su trabajo. Desde mi opinión quiero desglosarlos por partes para que nos demos
cuenta de una vez la imperiosa necesidad de saber el valor de tener buenos
profesionales en todas las ramas esenciales a nivel laboral que demanda la
sociedad.
Barrenderos:
Obviamente porque se pare la
actividad humana en los trabajos y calles no por ello significa que no se genere
suciedad. Claro y deleznable ejemplo lo tenemos en esos inconscientes que salen
de los supermercados, se quitan los guantes y los tiran al suelo. ¿Pero tú eres
tont@? No solo por el hecho de que generas suciedad sino porque podrías tener
adherido Coronavirus y lo lanzas como si tal cosa al suelo. Y el barrendero
tiene que venir a recogerlo exponiéndose sin necesidad. Quiero empezar dando
este toque de atención a esos merdellones que pululan por toda España porque
fotos y videos de este tema me las he visto a centenares en las redes sociales
desde muchos puntos del país.
Se sigue generando suciedad
porque la naturaleza sigue avanzando y hay que barrer hojas, pequeñas ramas y
demás. Más basura que puede surgir que siempre hay. Cada barrendero sabe mejor
que yo todo lo que se limpia al día. Son ell@s, un sector que sigue a pie de
calle porque los municipios no pueden permitir que en esta crisis sanitaria
encima tener sucias las vías y espacios públicos. No sería ni tolerable, nunca,
y menos en esta época de recaudación de impuestos. Aparte de que luego están
desinfectando calles con máquinas de sulfatar y camiones cubas. Tal vez ese
aspecto deberían ser aún más radicales como lo están haciendo en China que
prácticamente han bañado las ciudades en desinfectantes. Comprenderán que yo no
sé los planing que tendrán los ayuntamientos en este tema, pero vamos que corra
el agua y los químicos.
A ell@s también les cogió el toro
en cierta manera y han tenido sobre la marcha que adaptarse a las
circunstancias. En el anterior escrito que dedicaba a las farmacias comentaba
que muchas de las medidas asépticas impuestas han llegado para quedarse y creo
que en el sector de la limpieza va a imponerse una nueva forma de trabajar aún
más higienizada. Esta crisis está desvelando muchas cosas y profesiones que
antaño eran hasta denostadas vemos como son imprescindibles en la sociedad.
Todo mi ánimo para los barrender@s del país que están haciendo una labor
impresionante para mantener todo limpio. No solo en sus funciones normales del
día a día sino en las labores de desinfección que o las hacen otro personal
como la UME o tienen que ser ellos mismos.
La imagen que acompaña este
escrito no es otra que la del amigo Manolo. A él le toca representar en este
escrito a todo el personal de limpieza del país. Manolo no necesita
presentación porque es ampliamente conocido en el pueblo. Recuerdo ahora muchas
caras y nombres de barrenderos. Isaac, Rafa…, que son con los que más trato
tengo por barrer por mi zona de residencia. Todos ellos con el compromiso
inquebrantable de mantenerse al pie del cañón conscientes de la importancia de
la limpieza ahora más que nunca. Gracias Manolo por la foto. ¡Animo!
Limpiadores/as:
Tal vez uno de los sectores más silenciosos,
pero más imprescindibles de la sociedad. Estas personas, indistintamente sean
del sector público o privado, les toca una labor a veces bastante complicada.
El Covid 19, por cierto, estoy hasta los cojones de que lo llamen “el bicho”
como para banalizar y blanquear la grave situación, se adhiere y permanece vivo
en superficie más tiempo del que se creía. Y superficie lo es todo. Desde el
móvil y monitor desde donde usted mi querido lector/a me lee hasta el teclado
con el que yo escribo estas palabras. Y son los limpiadores/as los que trabajan
sobre esas superficies tal vez contaminadas. Y ya no digamos en baños y
cocinas. Y dando una vuelta de tuerca prefiero ni pensar en los hospitales de
limpiadores sanitarios. Es tan importante su labor que el otro día oía un
médico hablando de la asepsia y comentaba que en urgencias tras atender a una
persona supuestamente con Covid 19, diera positivo o no, entraba la limpiadora
a desinfectarlo todo. Porque tienes que sentar al paciente en camilla, tocar
puerta, silla, mesa, ordenador. A veces se mitiga si hay dos médicos para uno
atender al paciente y otro tomar las notas. Incluso comentaba que se dividen
los espacios por zonas, para que las zonas limpias siempre sean limpias y las
no limpias se limpien tras cada paciente. La presión que deben sufrir estos
trabajadores de la limpieza es contante y fuerte. Me comentan desde la empresa
privada que han tomado unas medidas bastante drásticas debido a lo sensible del
tema y que esto irá a más porque luego entraremos en fase heurística.
Afortunadamente el Covid 19 no soporta los productos de limpieza existentes.
Desde legía, cloro y demás. Aun así, este sector no debe bajar la guardia pese
al cese de las actividades laborales. Profesión imprescindible donde las haya.
Por cierto, otra de las profesiones denostadas. Pues mira ya ves como las
circunstancias ponen a cada uno en su sitio. Entre un elitista y una limpiadora
me quedo con esta última. Tenemos el caso de Valentina Cepeda. 29 años de
limpiadora en el Congreso de los Diputados y hace unas semanas los pocos
diputados le brindaron un aplauso y luego el agradecimiento de Sánchez.
Sinceramente que se tenga que reconocer esta imprescindible labor bajo tales
circunstancias… Ella también pone cara a este sector. Mucha fuerza para estos
trabajadores/as.
Basureros:
De las tres actividades hoy
traídas en este escrito indudablemente opino que ellos son los de mayor riesgo
porque deben recoger y transportar toda la basura que sigue generando la
sociedad. Sí es verdad que en varios puntos del país han manifestado que no existe
un protocolo claro de cómo actuar en este caso. ¿Ustedes se imagina como debe
de estar de microbios, indistintamente de su clase, la superficie de un
containe de basura? Pues amigo@ eso hay que vaciarlo y limpiarlo. Y son esos
señores que rompen el silencio de la noche los encargados de ello. Aquí en La
Orotava la verdad que en ese tema es ejemplar la asepsia que hay. Por lo menos
en el Casco. Y esto no lo digo por quedar bien. Recuerden que los servicios
municipales los pagamos el pueblo y si estuviera el servicio de recogida de
basuras deficiente así lo escribiría. Y me quedaría tan tranquilo.
Afortunadamente no es el caso. Pero sí he visto que hay municipios de muchas
zonas del país que les ha costado bastante actuar con celeridad en este tema. Aun
así, con un virus que se adhiere y vive en superficie, aunque yo opino que
también se trasmite vía aérea, toda precaución es poca. Una de las cosas que siempre
he echado en falta en los containes de basura en nuestro municipio es que no
tengan pedal para no tener que tocar la tapa. Ahora mismo por mi zona están sin
tapa, supongo que precisamente para evitar ese contacto. Al menos así los he
visto yo con la tapa abierta. Porque estamos en lo mismo. Si yo cojo y llevo la
bolsa de basura, levanto la tapa con un guante o pañuelo de papel dicho guante
o pañuelo lo voy a depositar en la papelera más cercana. Allí queda horas hasta
que pase el barrendero y a saber lo qué se adhiere. Todo esto va encadenado
hasta que llegan los basureros. Buscando un símil a nivel de urbe los basureros
son aquellos que en la antigua Unión Soviética llamaban los “liquidadores”
cuando el desastre de Chernóbil. Liquidación total que se hace al llegar al
PIRS donde hay otros operarios que finiquitan el trabajo. No quiero tocar mucho
el tema de los PIRS pues no conozco a nadie que trabaje ahí y si no tengo datos
de rigor prefiero omitir. Mucha fuerza para ellos.
Sea mi humilde tributo para estos
tres sectores englobados en la limpieza que tan fundamentales e imprescindibles
son. Como he dicho, y vuelvo a repetirlo, profesiones muchas veces denostadas
bien por el inculto, bien por el prepotente. Y ahora se comprueba que es más imprescindible
el uniforme de barrendero, limpiadora y basurero que el ir de chaqueta y
corbata. La limpieza lo es todo. E incido en lo mismo que en escritos pasados. Podían
haber abandonado, pedir reducción de jornada y demás. Según me comentan las
personas que he preguntado, que van muchísimo más allá de Manolo u otros
profesionales de este sector, tienen un considerable respeto al Covid 19. No
por ellos sino por la familia. Pero están en esa primera línea de fuego porque
saben que tienen que liquidar a este enemigo invisible que nos ha invadido. Esto
lo vamos a vencer, pero como digo siempre nos es imprescindible quedarnos en
casa para romper la cadena de contagio. Es la mejor forma de ayudarlos a ell@s.
Y por favor la gente que sale de sus casas a comprar y demás faciliten las
labores de limpieza cumpliendo las normas higiénicas. Les recuerdo que
barrenderos, limpiadores/as y basureros también son parte de esa infantería
combatiendo en primera línea en nuestras calles, edificios y dónde se les
precise. Y ellos tampoco son robots que se apagan tras finalizar a jornada. Tienen
familia y una propia vida que proteger. Son nuestros baluartes.
Muchas gracias a tod@s por ello.
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© 2020 Francisco García.
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a favor de © Francisco García.
Primera edición del texto: Abril
de 2020.
Imágenes:
Manuel Expósito.
Barcelona al día: https://www.barcelonaaldia.com/2019/04/17/siete-empresas-se-presentan-a-la-adjudicacion-del-nuevo-contrato-de-limpieza-y-recogida-de-residuos/